Historia de Santa Eulalia
Santa Eulalia, fue fundado como pueblo por el año 1550,
parte del Curato de Soloma, corregimiento de Totonicapán, a cargo de la orden
de la Merced. La organización religiosa tradicional Maya, Alcaldes Rezadores
solían cuidar un importante archivo de documentos históricos, libros de
tributos de la época colonial, conflictos de límites con otros municipios,
memoria de invasiones Lacandonas y expediciones contra ellos. La iglesia
católica cuenta con reliquias de la época colonial, manuscritos de música
sacra, una campana fechada en
1, 710.
En 1, 836 al distribuirse los pueblos de la República de Guatemala, Santa
Eulalia queda inscrito al circuito de Jacaltenango En 1,871 con la adjudicación
de terrenos baldíos y municipales de Santa Eulalia a Santa Cruz Yalmux queda
separado un territorio de este municipio para formar parte del municipio de
Barillas.
Se menciona que a finales del siglo XIX llegaron a poblar la cabecera municipal
familias ladinas, pero en la actualidad se habla de un máximo de 10 familias no
Mayas viviendo en Santa Eulalia cabecera, sin embargo algunos propietarios de
tierras en parte baja del municipio pertenecen a este grupo.
Santa Eulalia es un municipio casi totalmente poblado por hablantes de
Q'anjob'al, y muy pocos hablan el español; siendo el idioma materno el
Q'anjob'al, el principal transmisor de patrones culturales, según el acuerdo
sobre Identidad y Derechos de los Pueblos Indígenas, firmado en los Acuerdos de
Paz de 1, 995.
La fundación del pueblo actual de Santa Eulalia se debe a
los frailes de Santo Domingo, a mediados del siglo XVI, se establecieron en Pay
Konob', considerado por los habitantes como lugar de origen de su pueblo, donde
construyeron la primera iglesia."
Según George Lovell el actual pueblo de Santa Eulalia
correspondía a la encomienda de Gonzalo de Ovalle concedida en 1524 con el
nombre de encomienda de Tecpán Puyumatlan.
Sin embargo la guerra que los lacandones seguían en el
norte, atacando a los pueblos recién convertidos al cristianismo y Pay Konob',
por encontrarse en un lugar accesible en la ruta hacia el norte, también fue
objeto de esos ataques. Esta situación obligó a las autoridades coloniales el
traslado del pueblo. En primer termino se buscó un lugar menos accesible a
dichos ataques, por otra parte los frailes tomaron en cuenta la existencia de
un antiguo lugar sagrado para la fundación de ese nuevo pueblo, pues la iglesia
esta construida sobre un lugar sagrado desde la cosmovisión de los q'anjoba'les
de Santa Eulalia.
A finales del siglo XVI los frailes de la Orden de Santo
Domingo cedieron las parroquias de los Cuchumatanes a los de la Orden de la
Merced, Santa Eulalia es fundado como pueblo en la localidad actual a mediados
del siglo XVI (1550 aprox.) formando parte del curato de Soloma, corregimiento
de Totonicapán. Y hacia el año 1600 Santa Eulalia era un pueblo dependiente del
convento de Chiantla.
Según el cronista Francisco Antonio de Fuentes y Guzmán en su obra Recordación
Florida indica que el pueblo de Santa Eulalia se encontraba en la cima de un
monte como estrategia de defensa ante los lacandones y que para ese entonces
contaba con 800 habitantes.
En la "Descripción Geográfico-Moral de la Diócesis de Goathemala" el
Arzobispo Pedro Cortés y Larraz (1770) es mencionado el pueblo de Santa Eulalia
como anexo a la parroquia de San Pedro Tz'uluma', con 1,071 habitantes,
señalando que las tierras de cultivo de los vecinos estaban muy alejadas, a
unas 20 leguas, en tierra caliente, en las vecindades de la zona habitada por
los lacandones.
La mayor diferencia para los habitantes de estas comarcas
fue la ausencia de curas para atender las parroquias, lo que causo un
relajamiento de influencia externa permitiendo la pervivencia autóctona, las
formas de organización político administrativa originadas por el régimen
colonial prevalecieron y subsistieron lo mismo que la costumbre (sincretismo
entre creencias y tradiciones propias y las cristianas importadas) y parte de
su cosmovisión.
En 1836, al efectuarse la división territorial de Guatemala para la
administración de justicia, Santa Eulalia es incluido dentro del circuito de
Jacaltenango, los diferentes movimientos políticos y militares que siguieron a
la independencia y al movimiento Liberal de Justo Rufino Barrios y Miguel
García Granados, de 1820 a 1872, que habían dejado en un abandono
administrativo y clerical el territorio del norte de Huehuetenango deja su
situación para ser centro de atención de Ladinos ex milicianos del movimiento
liberal que se apoderan de las tierras bajas de Santa Eulalia, segregándola
para formar el actual municipio de Barillas oficialmente el 17 de octubre de
1888.
Con Justo Rufino Barrios fueron concedidas las tierras del norte de
Huehuetenango a los milicianos, o fueron reclamadas por sus descendientes que
se fueron asentando lentamente en las tierras más fértiles, que
tradicionalmente habían sido tierras chujes y q'anjob'ales de San Mateo Ixtatán
y Santa Eulalia respectivamente, asentándose los primeros ladinos que dieron
como resultado la separación de las mismas en la jurisdicción de Santa Eulalia.
El libro "Santa Eulalia: tierra de nuestros
antepasados y esperanza para nuestros hijos" se refiere a los Alcaldes
Rezadores, como institución que ejerció la autoridad en el municipio hasta
1873, después de la revolución liberal. Los Alcaldes Rezadores eran dos y los
seleccionaban los principales, a cuya cabeza estaba "El Cabecera del
Pueblo".
También se menciona en este libro la leyenda de Santa
Eulalia Virgen y su relación del traslado de Pay Konob' al actual sitio de Santa
Eulalia , lugar escogido por la Santa para protegerlos de los asaltos de los
Kab'nales (lacandones).
Otro hecho es la presencia de la Misión Maryknoll, que
llegaron en 1943 y fundaron una escuela parroquial y la primera clínica que
hubo en el municipio, organizaron la primera Cooperativa Agrícola de San
Dionisio en 1964 e introdujeron semillas mejoradas de trigo.
En 1963 los Misioneros
Maryknoll descubrieron en diferentes municipios de Huehuetenango nueve códices
o manuscritos musicales, seis de ellos en Santa Eulalia, que fueron copiados
por músicos indígenas a finales del siglo XVI y principios del siglo XVII.
Dichos códices contienen un gran repertorio de música de famosos compositores
europeos del siglo XVI y aportes musicales de los maestros de capilla indígena,
que copiaron y armaron las colecciones de música. Dichos códices contienen
música sacra en latín y música profana, villancicos y piezas instrumentales, en
español, q'anjob'al y otros idiomas indígenas. Uno de estos códices esta
firmado en Santa Eulalia en 1582 por el maestro capilla Francisco de León.
TURISMO
El paisaje, las tradiciones y el folklore hacen de Santa Eulalia un potencial
turístico, las áreas de vegetación como factibles áreas de reserva ecológica
pueden considerarse factibles para el turismo ecológico, aunque no existe
infraestructura, ni proyección local hacia esto.
Fuente: Asociacion Q'anjob'al Ewulense-LA